jueves, 24 de septiembre de 2009

Paseando por el Hooghly

El sábado pasado Ravi nos llevó a conocer el templo de Dakshineshwar. Nos pasó a buscar con su roomie en un yellow cab y salimos en dirección norte. No deja de impresionarnos la cantidad de gente que hay en esta ciudad. Algunos dicen que es la mas grande de la India (pero también nos dijeron que estamos en invierno, o que el taxi ya nos está esperando en la puerta, o que hay una oficina de South African Airways en el aeropuerto de Kolkata, o que mi valija iba a llegar a destino conmigo…) en fin. No sabemos de donde sale tanta gente, no sabemos de donde viene ni a donde va, pero ahí están. Todas las esquinas parecen Florida y Corrientes. No exagero. Los semáforos son eternos, el tránsito imposible. No fuimos taaan lejos, no se la distancia exacta en kilómetros, pero nos llevo una hora llegar. Ravi nos comentó que ya había ido otras tres veces a este templo, exactamente no sabemos a que van ya que no entró a meditar ni nada por el estilo, solo van, dan una vuelta, se sientan por ahí. Aparentemente no hay parques o plazas acá en Kolkata (vimos un solo parque hasta ahora) y la gente se junta en estos lugares. A diferencia de la religión cristiana que tiene una misa todos los días o por lo menos una importante los domingos a la que uno va para cumplir su deber en lo religioso, los hindúes no tienen misas ni ceremonias adentro de los templos. Simplemente van y meditan cuando quieren, se juntan alrededor de los templos a comer unas frituras picantes y se bañan en el río. Es otro estilo de vida.

El taxi nos dejó en una calle llena de puestitos que vendían imágenes, fotos, y dibujos de los dioses que se adoraban en ese templo y de los ya famosos Durga, Brahma, Ganesh, etc. También sobraban los que vendían comida, en todas sus formas. Mas que nada frituras que meten en envases y bolsas enormes y deben vender al peso. Había algunos kioscos, casas de celulares, tipos que te cortan el pelo ahí en la calle y un robot petisito que tenía un par de auriculares. Ví dos o tres de estos, no tengo idea de que era porque estaba escrito en bengalí y hasta el alfabeto es distinto.

Dejamos nuestras zapatillas en un puestito que por unas pocas rupias te los cuidaba de los avivados que se afanan los zapatos de los que entran al templo. Espero que en el Taj Mahal haya puestos parecidos, no quiero que me pase la de Slumdog Millonaire… Después de revisarnos como si entráramos a un aeropuerto accedimos al patio del templo Dakshineshwar. No había mucho que ver y tampoco mucho para contar. No nos permitieron sacar fotos en el patio y había una cola importante para entrar a la sala donde se medita. Ravi nos dijo que esa cola nos iba a tomar unos 50 minutos, y dado que no teníamos mucho para meditar, salimos por otra puerta a la orilla del río.

Ahí vimos el río Hooglhy por primera vez desde que estamos en Kolkata. El Hooghly (léase “ugly” = “feo”) es uno de los brazos del Ganges, en algunas partes tiene una profundidad de mas de 120 metros y está sumamente contaminado. Es un río sagrado y la gente se baña ahí para purificarse. Hay escaleras que llevan desde la calle al río para que la gente baje y se de un chapuzón. Algunos hasta se hacen unas gárgaras con el agua para purificarse por adentro ¿¿??. No se los recomiendo. El amigo de Ravi se subió un poco los pantalones y se refrescó un poco, nosotros preferimos evitar acercarnos mucho al agua. Admito que pensé que el olor a podrido iba a ser insoportable, teniendo en cuenta que tiran todo al río, pero nada que ver, es más era mucho mas soportable que el Riachuelo.



Volvimos a buscar las zapatillas y fuimos a tomar una lancha para cruzar al otro lado del río, para conocer el templo Belur Math. La lanchita salía 7 rupias por persona, sinó podíamos contratar una lanchita privada por 200 rupias. Como justo estaba saliendo una lancha “pública”, pagamos los Rs. 7 y subimos. En el viaje fuimos varias veces bendecidos por el agua del Hoogly que nos salpicaba en cada salto. Llegamos al templo y esta vez la prohibición de tomar fotos se extendía desde la entrada al parque. Según nos contaron mas adelante, el templo fue construido por un hindú muy famoso que vivió en los Estados Unidos y decidió dedicárselo a su gurú, su maestro Swami Vivekananda. Después de sacarnos nuevamente los zapatos entramos al templo y pudimos ver la imagen de Swami Vivekananda y la gente sentada en el piso meditando frente a ella. Algunos llevaban sus almohadones por lo que creo que pasan un buen rato.




Al volver contratamos una lancha privada para tener más comodidad y poder tomar fotos como las que están viendo acá. Mientras íbamos pasando junto a la costa los chicos saludaban como solemos ver en los documentales sobre la India. Parecía una película de Bolliywod. Fue lo mejor del viaje hasta el momento (incluso mejor que el KK). Ravi nos enseño a decir Namaskar que significa “Hola” en hindi. Nosotros le enseñamos a decir “Hola” y entre otras palabras también intercambiamos como se dice “Vaca”. A Ravi le pareció cómico y a todos los que saludaban les decía “hola vaca!”. Jaja, muy bueno! Nosotros saludabamos en hindi como pueden escuchar en el videito. Espero que les guste el video!



Como siempre, la vuelta fue más complicada que la ida. El tránsito era el doble de peor. El taxista nos terminó paseando un poco (y eso que íbamos con Ravi) y tardamos casi hora y media, pero poco nos importó porque habíamos pasado una tarde bastante entretenida, tuvimos nuestros momentos para sacar unas buena fotos y para meternos un poquito en la cultura hindú. Me gustaría seguir contando lo que pasó después, pero es jueves por la noche, hoy empieza el Durga Puja que es la mayor festividad en la India y tenemos que salir un poco a ver como vistieron a la ciudad. Hoy terminó nuestra semana laboral que por suerte no fue muy atareada. A partir de mañana tenemos un fin de semana largo de cuatro días que vamos a aprovechar para ir a New Delhi, Agra y Jaipur, conociendo lugares emblemáticos de la India, entre ellos el Taj Mahal. Bueno, me despido por ahora bhalo theko. Feliz Durga Puja!

No hay comentarios:

Publicar un comentario